La electricidad es lo que mueve el mundo moderno, y a menudo la damos por hecho. Si ocurriera una catástrofe natural, hay algunas cosas que hay que recordar para mantenernos seguros con respecto a la electricidad durante la tormenta.
Antes de que se desate la tormenta, asegúrese de cargar todos los teléfonos y otros dispositivos de comunicación. Luego, desenchufe todos los aparatos electrónicos y colóquelos lo más alto posible para evitar que se dañen con en caso de inundación.
Apague el disyuntor principal que alimenta la casa para evitar sobrecargas en los cables y los electrodomésticos.
Una vez que pase la tormenta, y comience a evaluar las consecuencias de esta, es importante evitar las áreas inundadas, ya que pueden estar electrificadas. No use equipos eléctricos o electrónicos que hayan quedado sumergidos. Si hubo inundación, contrate a un electricista cualificado para que inspeccione el sistema eléctrico.
Si usa un generador portátil, asegúrese de que lo haya instalado un electricista cualificado, y asegúrese de usar siempre un interruptor de transferencia y protección de GFCI es una buena idea proteger su hogar con detectores de monóxido de carbono.
Al salir fuera de la casa, esté alerta a su alrededor. Si se encuentra con un cable de electricidad caído, quédese a una distancia de 10 metros (35 pies), como mínimo. No toque ningún objeto que esté debajo del cable. Si hay otras personas cerca, avíseles para que se mantengan alejados, y llame al 9-1-1.
Las tormentas pueden ser devastadoras para una comunidad, y el período posterior puede ser difícil. No obstante, podría ser una oportunidad para renovar y actualizar su fuente de energía principal con energía renovable, como la energía solar.
El agua de inundación y el viento fuerte no son los únicos peligros que están presentes durante una tormenta. Por eso es importante tratar la electricidad con extrema precaución.